martes, 14 de febrero de 2017

Mi carta a Elisa [Tercera carta]

Mi querida Elisa:

Después de mucho tiempo, sin tener noticias y ver que nuestra hija Alicia, ha nacido sana y salva, me ha alegrado mucho de su nacimiento estando aquí. Espero vivir para poder verla y cogerla en mis manos. Pero de momento no será posible.

Actualmente estamos avanzando en territorio enemigo, hacia la capital y los oficiales han decido parar la marcha y poder descansar en un pequeño pueblo cercano. Los aldeanos, hartos de la guerra de su país, nos han recibido como héroes, y nos han permitido alojarnos en sus casas amablemente. Por fin, he podido descansar.

Durante nuestra instancia aquí, he conocido el verdadero significado de la palabra paz. No más ruidos por la noche, el silencio del día, las sonrisas de mis compañeros de armas. Todas las cosas positivas que puedes imaginarte, se reune en esa palabra. En el fondo sé que todo esto es un espejismo, porque pronto nos marcharemos, pero al menos disfruto de estos días.

Sin embargo, no podré disfrutar de mi verdadera paz todavía. La guerra me ha cambiado, convirtiéndome en un monstruo que lucha a las ordenes de un país que busca la paz de su pueblo y no tengo piedad de mis enemigos en el campo de batalla, pero en mi interior sigo teniendo un pequeño refugio, donde guardo mi parte humana, los buenos momentos contigo y los deseos de reunirme con vosotras.

Ahora tengo que despedirme, necesito descansar, ya que pronto terminará esta paz y volverá el infierno los próximos días.

Os quiero mucho.

No hay comentarios: