Hola a tod@s:
Sin duda, a veces deprime viajar en Cercanías.
Ya no solo es por el servicio en si (quedarse parado 40 minutos en la
vía, no pasar el tren que deseo coger después de esperar 20 minutos en
el andén, o que pase de largo, por motivos desconocidos...), sino
también por la gente. Y es que a veces, no sabes si llorar o pasar de
todos. Por las mañanas, desesperadas quieren llegar al curro como sea,
tanto que haría cualquier cosa (empujarte o tirarte) para entrar en
vagones que van llenos. Y el panorama se repite en el regreso. Sin
embargo, después de lo que he citado lo que realmente me deprime es
cuando entro y veo los rostros de la gente. Sinceramente, si el Cercanías hiciera un anuncio de su maravilloso servicio cogiendo a la gente que van en el tren, fijo que nadie coge mas el Cercanías.
Caras desganadas, tristes, nerviosos por el trabajo, agobiados por la
presión, caras dormidas de no dormir bien.... .Todas los días de
trabajo igual. Al final tengo que coger mis cascos y auto aislarme de todo ese entorno gracias a la música y los libros.
Hoy
me llamo la atención una tontería, pero me gusto mucho. Al coger el
tren de vuelta, había un niño pequeño cogiendo la mano de su madre. No
paraba de observar al niño, por su curiosidad de mirar por todos lados.
En ese momento se quedo mirándome un rato, me sonríe, y yo le respondí
con una sonrisa. El niño con cara de asombro, se acerco a una persona
mayor y le cogió del pantalón. El anciano le mira como diciendo: "¡¡NIÑOOOO!!".
Pero el niño sin asustarse de su cara, le soltó una sonrisa. Conmovido
por esa mirada, le devolvió otra sonrisa. El niño corrió hacia otro
grupo y les mostró su sonrisa. Estuvo todo el rato así, arrancando una
sonrisa imposible entre los pasajeros, incluso algunos le regalaba
cosas al niño. Al final se bajó en Las águilas, y cuando baja al anden, se volvió hacia y me dedico otra sonrisa (que detalle).
El
niño que cambio el ambiente de pesimismo que veía constantemente , por
alegría y gracia. Un solo niño, lo que pudo hacer con una sonrisa para
alegrar un momento, la triste vida que sufría algunos. Es una de esos
detalles que siempre me alegra y me gusta.
Saludos
Sin duda, a veces deprime viajar en Cercanías.
Ya no solo es por el servicio en si (quedarse parado 40 minutos en la
vía, no pasar el tren que deseo coger después de esperar 20 minutos en
el andén, o que pase de largo, por motivos desconocidos...), sino
también por la gente. Y es que a veces, no sabes si llorar o pasar de
todos. Por las mañanas, desesperadas quieren llegar al curro como sea,
tanto que haría cualquier cosa (empujarte o tirarte) para entrar en
vagones que van llenos. Y el panorama se repite en el regreso. Sin
embargo, después de lo que he citado lo que realmente me deprime es
cuando entro y veo los rostros de la gente. Sinceramente, si el Cercanías hiciera un anuncio de su maravilloso servicio cogiendo a la gente que van en el tren, fijo que nadie coge mas el Cercanías.
Caras desganadas, tristes, nerviosos por el trabajo, agobiados por la
presión, caras dormidas de no dormir bien.... .Todas los días de
trabajo igual. Al final tengo que coger mis cascos y auto aislarme de todo ese entorno gracias a la música y los libros.
Hoy
me llamo la atención una tontería, pero me gusto mucho. Al coger el
tren de vuelta, había un niño pequeño cogiendo la mano de su madre. No
paraba de observar al niño, por su curiosidad de mirar por todos lados.
En ese momento se quedo mirándome un rato, me sonríe, y yo le respondí
con una sonrisa. El niño con cara de asombro, se acerco a una persona
mayor y le cogió del pantalón. El anciano le mira como diciendo: "¡¡NIÑOOOO!!".
Pero el niño sin asustarse de su cara, le soltó una sonrisa. Conmovido
por esa mirada, le devolvió otra sonrisa. El niño corrió hacia otro
grupo y les mostró su sonrisa. Estuvo todo el rato así, arrancando una
sonrisa imposible entre los pasajeros, incluso algunos le regalaba
cosas al niño. Al final se bajó en Las águilas, y cuando baja al anden, se volvió hacia y me dedico otra sonrisa (que detalle).
El
niño que cambio el ambiente de pesimismo que veía constantemente , por
alegría y gracia. Un solo niño, lo que pudo hacer con una sonrisa para
alegrar un momento, la triste vida que sufría algunos. Es una de esos
detalles que siempre me alegra y me gusta.
Saludos
1 comentario:
Bonito post ^^Además la myoría de los niños que uno se encuentra solo lloran xD Pero cuando pillas uno de estos la cosa va mejor :):***
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